Ruta: Oliván (900 m.)- Susín (1.070 m.)- Casbas de Jaca (1.180 m.)- Peña Blanca (1.762 m.)- Pico Oturia (1.921 m.). El regreso por la misma ruta.
Accesos: Nos situamos en Sabiñánigo y tomamos la carretera a Formigal N-260. Pasaremos la localidad de Senegüé y una larga recta con el Cámping de Senegüé a la izquierda. Cuando termina esta recta entramos en un tramo de curvas amplias donde aparece el desvío bien señalizado a Oliván. Ahora la carretera es estrecha y siguiendo los desvíos señalizados llegaremos en unas últimas zetas de ascenso a Oliván. Aparcaremos cerca de la Iglesia.
Horarios: 00:00 h. Salimos de Oliván.
00:08 h. Puente sobre el Barranco Bergusa.
00:30 h. Susín
00:55 h. Casbas de Jaca
02:15 h. Salida del bosque a zona de prados.
03:00 h. Pico Oturia.
03:10 h. Inicio del descenso.
03:30 h. Entrada en el bosque.
04:30 h. Susín
04:55 h. Oliván.
Desniveles: Acumulados 1.100 metros en ascenso y los mismos en descenso.
Dificultad: Fácil recorrido aunque algo largo. Desde Casbas de Jaca, la pista se puede ir atajando por algunos enlaces lo que reduce la distancia aunque hay que estar atentos a los hitos de señalización. Una vez fuera del bosque olvidarse de la pista y seguir plenamente por el cordal que lleva a la cima.
Mapa con el recorrido aproximado. Fijarse que trazo la ruta cortando la pista en varios lugares. En este mapa los cruces son orientativos, seguir en el terreno los hitos y las señales amarillo blancas hasta salir del bosque.
Bonita panorámica del Oturia. La cresta de nuestro recorrido es la que sube desde la izquierda.
Aparco con las primeras luces junto a la iglesia de Oliván dedicada a San Martín. Bello ejemplo de románico lombardo. Al fondo Sabiñánigo con luces y algunos humos.
Descendemos por las callejuelas de Oliván en dirección al Barranco Bergusa (Este).
Que cruzaremos ya por pista de tierra por este puente. Podemos llegar con los vehículos hasta este punto. A partir del puente la circulación está restringida.
Seguimos por la pista hasta que en unos 10 minutos encontremos este poste que nos indica que debemos dejarla y tomar el sendero dirección Susín.
Sendero bien pisado y que en un momento cruzará la pista para ya, sin nuevos encuentros, elevarnos hasta el despoblado de Susín.
La llegada a Susín se hace por el camino empedrado de la derecha. Este nuevo poste (antes de entrar en el pueblo), nos marca la nueva dirección hacia Casbas de Jaca.
Pero vale la pena dar una vuelta por el callejero de Susín, donde alguna casa mantiene signos de vida. La última habitante más o menos estable en Susín falleció hace muy pocos años. También podemos llegar al pueblo por pista, aunque con autorización.
La pequeña iglesia de Susín, restaurada por la Asociación de Amigos del Serrablo es un precioso templo románico lombardo del siglo XII.
Bueno, no se puede perder mucho el tiempo, pues la ruta es algo larga, Retorno al poste que encontré a la entrada del pueblo y por camino claro continúo el ascenso. Caminos antiguos, caminos de cultura que unían estos pequeños pueblos que ya han quedado abandonados.
En pocos minutos llegamos a Casbas de Jaca, nuevo despoblado pero en este caso más evidente por lo ruinoso del entorno. Pocos muros quedan en pie. Seguimos en la sombra, aunque podemos divisar la Sierra de la Partacua soleada. El sendero se torna confuso a la llegada al despoblado, pero deberemos buscar la torre de la iglesia como referencia.
Llegamos a ella y procuraremos recordar para la vuelta los pasos que hemos dado. Ya digo que es el punto más confuso.
Me asomo al interior ruinoso, pero que tiene unas dimensiones interesantes para una población que debió tener muy pocos habitantes.
Junto a la iglesia estos carteles clavados que marcan de nuevo la dirección Santa Orosia.
Ahora la ruta discurre por pista bien conservada, pero que está trazada con muy poca pendiente por lo que parece oportuno para reducir el tiempo de nuestro recorrido, ir tomando los atajos señalizados que nos aparecerán de vez en cuando. En los atajos encontraremos pintadas en algunos árboles las señales amarillo y blancas de un PR.
Todavía en sombra pues nos movemos por ladera Norte.
Uno de los atajos. Se puede apreciar el hito.
Y en los atajos sendero en bastante buen estado.
Enlace con otro tramo de pista para luego nuevo atajo por sendero. Este trajín de cambios de pista a senda y viceversa, nos llevará más de una hora.
Finalmente y cuando llevamos dos horas y cuarto desde la salida, dejamos el bosque y podemos mirar ampliamente al Pirineo.
Aunque a la salida del bosque nos aparecerá de nuevo la pista, procuraremos seguir con la mayor fidelidad la línea de cresta que nos evitará dar los rodeos de la pista.
Mirada hacia el Oeste con la Peña Oroel en la lejanía.
Seguimos para alcanzar la cómoda cresta por terreno ya nevado.
Orientación sobre nuestra salida del bosque.
Pequeños y helados pinos que parece querer señalarnos la ubicación de Monte Perdido.
Valla de pastoreo que saltaremos mediante unas piedras adecuadamente colocadas. Al fondo ya se divisa el Oturia y el cresteo que debemos seguir.
Nos parecerá más largo de lo que es pero podemos ir disfrutando de unas buenas vistas a los dos lados.
Ultimo tramo con el hito y el poste geodésico a la vista.
Sabiñánigo a los pies del Pico Oturia.
Llegada a la cima.
Y fotografías desde la misma.
Las Tres Sorores con zoom. Se aprecian los cortados del Valle de Ordesa.
En la lejanía el Posets y la cresta de los Espadas.
El Macizo de Monte Perdido. Curioso como queda perfectamente marcada la línea de cota de la nieve. Tras un breve espacio de tiempo inicio el descenso. No conocía esta ruta y no esperaba tardar tres horas en llegar a la cima, además a buen paso, así que también a buen paso deshago mi camino para llegar en algo menos de dos horas al pueblo de Oliván.
Bonito y cuidado pueblo con bonitas casas y tejados curiosos como este de losas de piedra.
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